31 de agosto de 2014

Conocerlo sin saber quién es.

Cuando miras al rededor de ese parque ves algo a lo lejos que logras identificar y por supuesto es él, que camina hacia ti y tú piensas -es él y su cuerpo, su rostro, su manera de caminar que lo hace tan particular, es imposible no reconocerlo- quizá te parezca hermoso; cuando lo ves puedes tener una visión bella y fugaz que de un momento a otro se mezcla con la gran masa de rostros y luces, es ahí, cuando desesperas, buscando entre la cantidad de gente, de un lado a otro y no lo encuentras; su maravillosa apariencia se a difuminado como un par de estrellas.
Quedas ahí sentado, en ese lugar esperando que a los pocos instantes vuelva a aparecer, miras de un lado a otro y lo único que consigues es ver un tumulto de gente desconocida, ¿Qué cómo se llama él? No lo sé, eso solo lo sabe él y creo que a veces hasta se olvida de eso.
Es como si cada paso que da, cada rayo de sol, cada gesto, todo hiciera un conjunto real y grotesco.
Su belleza tan efímera a veces parece liberarlo mientras otras veces parece atarlo; no le gusta que nadie se le acerque y para ser alguien cercano a él, tienes que hacerle sentir que él está seguro, tampoco confía en mucha gente, su único confidente es un ser inerte: su almohada. 
Todo el que cree conocerlo en realidad a sido engañado, ni él mismo se conoce, se ahoga en su propio engaño, todo esto es una historia más, como la enorme sonrisa de Demi Lovato con otras mil versiones.
Él solo busca algo interesante, agradable, que lo complete, por eso anda en constante desplazamiento. Varias veces se ha preguntado -¿Y por qué no conoces gente?- -las personas no miran más allá de sus propios ojos, no me entienden-, el único que lo entiende es él mismo y su almohada que lo acompaña a todo sector donde va.
Yo sólo lo quiero conocer y quiero saber más del misterio que es él, pero él se basa en que nadie lo conozca, quizá sólo pertenece a mis sueños y por eso nadie lo conoce, hasta ese puede ser el verdadero misterio.

24 de agosto de 2014

Tragos Amargos.

Era un día jueves cuando compartía tiempo con mi mejor amiga llamada Paola, ella me dijo: -Cristian, mañana nos vamos de rumba- -listo pao, mañana vamos a rumbear y a enloquecernos-, se terminó el día y así quedamos.
En la mañana del viernes todo era incierto, de un momento a otro se podía cancelar todo, sin embargo, esto no pasó; llegó la noche, todo estaba listo, nosotros estábamos bellos y dispuestos para salir en busca de nuevas aventurillas. Mi amiga me recogió en su carro con una pareja de amigos, yo me subí al coche, salude y hubo un par de miradas coqueteadoras con Jenifer, la amiga de mi amiga. Un dato curioso es que quien iba junto con nosotros era ¡su novio!, Jenifer era una mujer muy tranquila y no le prestaba mucha atención a las relaciones serias, solo le gustaba sentir compañía.
Cuando llegamos a la discoteca, entramos y nos tomamos alguna cerveza para empezar, sonó una electrónica así que todo el mundo se puso de pie y salió a bailar, ninguno se quedó sentado en ese momento, la disco estaba llena. Entre canción y canción, fuimos bebiendo un poco más y más. Yo ya me sentía muy ebrio, así que, salí a fumarme un porro mientras seguía bebiendo. Por mi cabeza pasaban muchas cosas excitantes, me terminé de fumar el porro y decidí entrar de nuevo al ambiente juntos con mi amiga y sus amigos, en ese momento observe que el novio de Jenifer me miraba muy mal pero yo no le puse mucho cuidado a eso y seguí feliz en la rumba, copa va y copa viene, ya todos estábamos más ebrios de lo común.
Tomé un riesgo que quería afrontar desde que la vi: por sorpresa ¡¡BESÉ A JENIFER!!, su novio y mi amiga nos vieron porque la besé ahí frente a ellos, así que, nos separaron y Jonatan sacó a Jenifer del lugar para decirle –eres una puta, ¿Por qué te andas besando con todo mundo sabiendo que tú y yo somos novios?- -Ay! Relájate Jonathan que igual fue un beso nada más, yo te quiero a ti-.
Jonatan quedó muy anonadado y sin saber que hacer salió de la discoteca a calmarse un poco, ninguno de los que estábamos allí fue a acompañarlo ni nada, luego de un rato él entro y se dirigió hacia nosotros para pedir que nos fuéramos ya y como no accedimos a esa petición, Jonatan me llamó aparte y me dijo que lo acompañara a comprar un par de cigarros, con gusto lo acompañé, lo sorprendente es que cuando íbamos camino hacia la tienda él me iba hablando de muerte y ese tipo de cosas, pero supuse que lo decía por lo que había pasado, entonces yo en medio de mi ebriedad trataba de calmarlo; las calles estaban oscuras y solas pero aun así seguimos adelante, Jonatan me dijo –Cristian, llegamos, éste es tu fin- sacó un cuchillo, yo muerto del miedo salí a correr pero él supo hacer las cosas bien, minutos atrás habíamos cruzado una calle sin salida, yo quede atrapado y literalmente entre el cuchillo y la pared; Jonatan se acercaba lentamente y mientras tanto yo ideaba un plan para escaparme de tal mísera aventura, miraba para todos lados, no veía nada porque todo estaba tan oscuro, decidí gritar –¡AUXILIO, AUXILIO!-, él me dijo –por más que grites, nadie te escuchará, estamos solos en esto-,efectivamente parecía que nadie me escuchaba, mi corazón palpitaba tan fuerte, BUM BUM BUM, casi salía de mi cuerpo, Jonatan se acercaba cada vez más y yo tratando de encontrar una escapatoria pero mi corazón se escuchaba tan fuerte que no me dejaba oír nada más.

Jonatan quedó tan cerca de mí que alzó su cuchillo y me provisionó un par de puñaladas con el mismo, yo aún tenía la esperanza de que alguien me salvara pero no fue así, el novio de Jenifer me perforó la vena orta con su cuchillo y dejándome ahí tirado, muerto, cual indigente, se marchó para la discoteca y acosando a Paola y a Jenifer para que se fueran. Las dos se preguntaban qué había pasado conmigo y Jonatan no tenía respuesta alguna. Yo estaba muerto.

19 de agosto de 2014

Entre amigos más posibilidades hay para follar.

Él, llamó al teléfono; Felipe, su mejor amigo, estaba sólo en su casa, hablaron y hablaron por horas como solían hacerlo, el mejor amigo, decide invitarlo a su casa mientras sus padres llegaban y además de eso ven algo de televisión. Juan David Ibáñez Muños, siendo mejor amigo de Felipe Andrade por más de un año, llega a la casa. El par de amigos se saludan y entran a la casa para mirar la tele, mientras están frente al aparato tecnológico, Felipe se dirige a la cocina para traer algo de comer mientras David experimenta de nuevo ciertos sentimientos hacia Felipe, pero no se los da a conocer. Él mira morbosamente a Felipe, deseando que el susodicho lo ponga en cuatro patas para recibir la gigantesca verga erecta. Felipe, en el instante que salía de la sala, se dio un fuerte manotazo en las nalgas ¡¡TAZ!! A causa de un insecto que lo estaba picando, esta acción excitó muchísimo más a David.

Lo que David no sabía es que su mejor amigo “Pipe” como lo llamaban de cariño, también sentía ciertas palpitaciones por “JuanDa”, los dos eran ¡¡GAYS!! Y sentían un tanto de lo mismo pero nunca lo demostraban por miedo. Felipe se preguntaba ¿Y si voy y lo agarró por la espalda para hacerle sentir mi chimbo? ¿Se dejará? ¿Le gustará? mierda ¿Cómo reaccionará?, Después de todas esas preguntas, Felipe regresó a la sala, Juan David está de pie frente al televisor mirando algunos adornos.

Felipe se acerca, lo agarra por la espalda, lo arquea a tal punto de que su culo queda tocando la verga erecta de Felipe, los dos se emocionan, se excitan y de un momento a otro, Puff, Felipe ya no está, se marchó de nuevo a la cocina; Juan, lo persigue para ponerle fin a ese jueguito arrecho que comenzaron, se encuentran en la parte del arte culinario (la cocina), se besan, se tocan, se despojan de sus prendas y ahí es cuando... –Ring Ring, suena el teléfono-, Felipe contesta y son sus padres anunciando que se van a demorar más de lo esperado. 
El muchacho Ibáñez, se retira un momento para el baño, antes pidiéndole permiso a su amigo; cuando Ibáñez regresa a la sala, observa a Felipe ahí sentado sospechosamente, baja un poco la mirada y ve que Pipe tiene su gran anaconda venosa entre manos y la está acariciando rápidamente esto lo acompaña de un susurro: “Juan David, oh, que rico”.


Juan David, sigue caminando y mirando a Felipe se sienta junto a él, pipe se da cuenta de la aparición de su amigo y trata de guardar su verga venosa, pero JuanDa, arrecho le dice: -¡No la guardes!- a lo que pipe responde –vamos a mi cuarto-. Los dos se dirigen hacia el dormitorio para terminar de quitarse la ropa y poder seguir con sus demencias, cuando llegaron a la habitación, Juan David se agacha, tomando entre sus manos el pito de su amigo y listo para introducírselo a la boca, Felipe tumbado boca arriba sobre la cama desliza sus propias manos por todo su cuerpo hasta llegar a sus tetillas, él gemía de tal manera que apetecía que pasara algo más, David le susurra al oído –Follemos-, haciendo caso a esas palabras suaves, empiezan a follar violentamente, uno, dos y tres polvos de seguidos, David le pide que el cuarto se lo eche por todo el cuerpo y así fue, los dos se fundieron en una infinita humectación de sus cuerpos con el flujo que sale de sus miembros inferiores, semen.

18 de agosto de 2014

Te marchaste sin decir "Adiós"

Se han llevado un poco de aquello que me pertenece y eso me ha dolido mucho, a pasado demasiado tiempo desde aquel acontecimiento. Hoy tengo algo muy gratificante entre mis manos que me gustaría compartir contigo ¿Será qué no puedes venir un ratito? Sé que tal vez no querrás o simplemente no puedes, pero hoy quiero que sepas que te extraño mucho que te amé, te amo y te amaré.

16 de agosto de 2014

Una bella vivencia.

Era un día soleado con algunos avisos de que llovería, pero esto nunca sucedió. Decidí ir a casa de Alex, a eso de las 3:00 de la tarde, nos vimos, nos abrazamos, nos besamos y vimos unas pelis muy buenas; ya llegaba la noche y no teníamos mucho por hacer, así que... fuimos al supermarket, compramos una botella de vino, sin saber dónde la íbamos a consumir, se nos ocurrió ir a un parque cerca de donde estábamos; un parque bonito con rosas hermosas, pájaros cantando y uno que otro niño jugando con sus mascotas.
Nos acostamos en el pasto a observar las estrellas, mientras la botella de vino estaba guardada en mi mochila y esperando a gritos el momento para que fuera bebida por sus dueños; mientras nosotros esperábamos el instante exacto, los niños fueron desapareciendo, cada uno se marchaba para su casa.
En ese segundo nos dimos cuenta, fuimos preparando todo para que ese alcohol entrará a nuestros cuerpos; Alex destapó la botella mirándome fijamente a los ojos y yo a él, fuimos bebiendo poco a poco, milimetro a milimetro; nos terminamos esa botella de vino tinto, quedamos fogosos y ebrios. Un beso va un beso viene, nos sentíamos muy arrechos, cada vez más nos besamos salvajemente, tocándonos, y diciendo las cosas que pasaba por nuestras mentes.
Alex, se montó encima mío, nos tocamos, nos quitamos la ropa, follamos una dos y tres veces, éramos felices.

13 de agosto de 2014

Los problemas de la vida.

El sábado salí de fiesta con unos amigos... Llegué a casa a eso de las cinco de la madrugada, vi la luz encendida en la habitación de mi hermana, era muy extraño, porque momentos antes había hecho algunas llamadas y ella no me respondía; me puse muy nervioso porque no sabía qué había pasado, así que, antes de entrar, decidí llamar a el celador de la cuadra. Cuando nos armamos de valor, entramos, tocamos la puerta del cuarto de mi hermana, ella no daba señal alguna, entonces en ese momento fui en busca de las llaves para entrar; ¡la vi ahí tirada en el piso y junto a ella una caja de pastillas!. Cuando la llevamos a la clínica ya era demasiado tarde. En esas circunstancias me quede en estado de "shock" -Yo no sabía ni qué hacer-. Luego tuve un ataque de ansiedad, rabia, paranoia. Mi hermana se estaba matando, mientras yo estaba de fiesta, ¿Cómo se puede vivir cuándo tu hermana de tan solo 14 años se ha suicidado?.

Recuerdo que a principios de la semana estábamos en el sofá, hablando y ella me decía: "Estoy muy agotada de ésta vida de todo", pero nunca pensé que pudiera ser verdad y tampoco le presté mucha atención, porque eso lo decimos todos alguna vez en la vida.

El divorcio de nuestros padres, una relación que terminó hace poco y aún así, la despiden de su trabajo; eso y más problemas acabaron con ella, hasta llevar a este punto.
Estaba yo, allí;

Sentado cómo siempre 

mirándote, oliéndote, queriéndote.

Y tú, tú tan esquiva cómo sueles hacerlo siempre.

Yo, anhelando atraparte entre mis manos y que seas sólo para mí.

Mi hermoso amanecer, sé que eres el instante más maravilloso, cuando dos de tus astros se dan la mano, y también sé, que duras muy poco. Por esa simple y sencilla razón, es que te quiero sólo para mí.